En un reciente estudio del Consejo de la Juventud de España, se asegura que 8 de cada 10 jóvenes viven todavía con sus madres y sus padres, incapaces de independizarse por culpa de la crisis. Desde la Oficina de Okupación de Bilbo animamos a recuperar las viviendas vacías ahondando asi en el autoaprendizaje, la autogestión y la justicia social.
La crisis está ralentizando los planes de futuro de toda una generación de jóvenes. Ocho de cada diez están viviendo todavía bajo el techo de familiares y el horizonte de su futuro tiene bastantes nubarrones. El Consejo de la Juventud de España (CJE) certifica en su último informe sobre la emancipación que las condiciones de ese sector de la población han empeorado en el último trimestre. Sólo el 21% de jóvenes fuera del hogar paterno. Un dato que no se veía desde 2005. Esto supone once puntos menos que el mismo trimestre del año pasado.
Los principales problemas para irse de casa son la falta de oportunidades laborales y el pago de un alquiler o de la mensualidad de una hipoteca desorbitados. Casi cuatro de cada diez jóvenes forman la población inactiva, es decir, que están fuera del mercado laboral. La inmensa mayoría (el 74,3%) está estudiado.
La tasa de empleo, por otra parte, es del 35,5% y ha sufrido un descenso de siete puntos porcentuales con respecto a 2012. En este apartado, el estudio destaca que siete de cada diez menores de 30 años tenía alguna experiencia laboral anterior y el resto está buscando su primer trabajo. El desempleo de larga duración ha aumentado en el último año en todos los tramos de edad por culpa de la coyuntura económica.
El 90% de los contratos que se produjeron en el último trimestre fueron temporales, lo cual complica las posibilidades de futuro de l@s jóvenes y de acceso a la vivienda, donde los datos son “alarmantes”, según el estudio.
El Consejo denuncia que una persona joven debe destinar el 58% de su salario para poder adquirir una propiedad. Pero si no quiere sufrir un sobreendeudamiento, su sueldo tendría que crecer un 93,2% y los hogares jóvenes tendrían que aumentar sus ingresos en un 43,7% para poder asumir la compra de una vivienda sin dedicar más de tres de cada diez euros al pago de la hipoteca. Entonces, el alquiler puede ser una opción viable… pero no es así. Solo uno de cada diez jovenes puede abonar una renta sin riesgo de adquirir una deuda excesiva.
Ante esta situación, el CJE reivindica la puesta en marcha inmediata de políticas que hagan posible el derecho que tienen los y las jóvenes a emanciparse para poder tener una vida autónoma sin la dependencia económica de otros miembros de la familia.
En Euskal Herria existen más de 250.000 viviendas vacías, las suficientes para satisfacer la necesidad de vivienda de toda la población.
Por eso instamos a la administración a tomar medidas urgentes para acabar con las viviendas vacías y a llevar adelante una politica de vivienda que piense en las personas y no en las financieras e intereses económicos.
A las personas jóvenes, a las familias desahuciadas, a quienes están en riesgo de exclusión social, a las personas empobrecidas y explotadas... en definitiva, a quienes necesitan un techo digno les animamos a recuperar esas viviendas que no cumplen con el uso social que las leyes obligan a cumplir (en teoria) y a recuperar el derecho a techo que las leyes recogen (una vez más, en teoria).
Para cualquier duda no dudes en pasarte por la Oficina de Okupación y te aclararemos las dudas legales que tengas.